En éstas horas vacías
limpieza de recuerdos haré
exploraré mis antiguas memorias
del viejo anecdotario que una vez dibujé.
Sin orden en los tiempos
asearé el pasado de mi historia
tratando de no mezclar los recuerdos
de mi presente con los que son de mi ayer.
Comezaré por los de mis padres
su mirar tan puro como el de un niño
hasta el final de lo que fue su hermosa vida
sin la oportunidad de juntos los dos envejecer.
Guardando lo que fue su vivir
siempre provocando en mi ésa alegría
señalando el camino del amar y del sentir
y como sigue su voz presente en mi día a día.
Yo vaciaré hoy los recuerdos
de aquél instante y de cuanto lo sufri
el día que tatúo en mi corazón la hermosa vida
los tristes momentos en que uno a uno los vi partir.
Me quedaré con su alegría
con ése extrañado beso y sus ¡buenos días!
con la imagen de mi madre cantando por su cocina
y el silbar acompañando su canción de mi querido padre.
Y los millones de Te Quiero que de sus amorosos labios escuché.
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